El uno por uno de River en el agónico triunfo ante Instituto

Sacó un potente derechazo de Luna tras el rebote en la barrera en un tiro libro y atrapó un disparo débil de Suárez.

Ganó el partido con olfato de goleador nato: de palomita. No llegó a conectar un cabezazo de frente al arco por el segundo palo. Con su intensidad y personalidad habitual para proyectarse con convicción.

Anticipó oportunamente a Puebla en un centro punzante. Sufrió los movimientos de Luna en el primer tiempo y jugó el segundo.

Firme en los anticipos y cruces de cabeza. Falló pases sencillos aunque fue ganando confianza y claridad para limpiar la salida.

Sorprendió con un zurdazo bajo desde afuera del área que tapó Roffo y tiró un gran centro pasado para Montiel que Cachete no pudo convertir. Preciso en los pases aunque con c energías limitadas para cambiar el ritmo.

Distruyó bien hacia los costados, sobre todo para Montiel y Acuña. Careció de verticalidad y de mayor participación, tanto en la derecha como en izquierda tras la salida de Meza.

Cortó una amenazante sobre el final aunque también perdió varias pelotas por cansancio. Un par de quites valiosos delante de la zaga y un centro filoso para Colidio, aunque otra vez fue obstruido por los rivales.

Tiró el picante centro rasante del gol anulado a Borja. Con desplazamientos incómodos. Salió con un golpe en su rodilla izquierda a los 39’ PT.

Totalmente apagado en el segundo tiempo, había estado activo aunque sin claridad en los pases filtrados y sin desnivelar con su gambeta. Se esforzó en la presión y el retroceso.

Reclamó penal por un contacto mínimo, estuvo errático en los controles y no cuidó bien la pelota cuando no tuvo descarga. Sigue en un nivel muy inferior a su potencial.

Remató un zurdazo sin potencia a las manos de Roffo desde la izquierda. Le anularon un gol y aportó una buena habilitación a Colidio. Perdió varias pelotas de espaldas y lejos del arco. Estuvo estático y disperso.

Recorrió la banda derecha y dejó mano a ,mano a Tapia en el final. Sumó 51’ por Meza.

Clave por su cabezazo en el palo que derivó en el gol de Montiel. Había estado impreciso con la pelota y provocado una contra con una pérdida. Jugó todo el ST por Pezzella.

Le erró al arco tras el rebote de Roffo y en su definición por arriba en 45’ por Galoppo.

No influyó en reestreno en casa en el puesto de enganche. Jugó 27’ por Colidio.

Generó el corner del gol e inició de ataques con categoría en 15’ por Lanzini.

Repitió el 11 del 1-1 ante Platense con el mismo flojo resultado y tampoco cambió el partido con los ingresos y tres esquemas distintos en el ST. Lo salvó Montiel.