

Bartolomé Mitre se consolidó como el mejor equipo del Pre Federal de básquet y desató anteaoche una verdadera fiesta en el reducto del centro capitalino.
El triunfo 65 a 60 sobre Tokio sentenció la serie final con una apretado 2-1 que necesitó de dos tiempos suplementarios, lo que habla de la paridad absoluta entre los dos mejores equipos del campeonato.
Pero todo el trabajo de esta última parte del año se resumió en este cruce definitivo y las figuras del Auriazul aparecieron cuando tenían que hacerlo. Desde la contundencia del MVP Quimey Acosta, el manejo de los tiempos del capitán Luciano Tantos y, por sobre todas las cosas, la soberbia actuación del base Stefano Pierotti -autor de 16 puntos-.
“Sabíamos que iba a ser apretado como lo terminó siendo. Tokio es un grandísimo rival que fue creciendo a lo largo del campeonato, con un técnico nuevo que terminó de encajar. Fueron tres partidos durísimos y nadie regaló nada”, analizó el dorsal 4.
A la hora de puntualizar la clave del título, el oriundo de Puerto Rico de 27 años de edad remarcó que el recambio hizo inclinar la balanza: “Nosotros tuvimos un poquito más de resto en el final. La serie fue muy física con dos partidos en tres días, con dos suplementarios, pero logramos más rotación gracias al plantel largo”.
Stéfano llegó a finales de agosto proveniente de Italia, país donde estaba disputando la segunda división. Con este logro consumado ahora resta saber qué pasará con su futuro, algo que todavía no lo tiene definido.

“Ahora quiero disfrutar con mis compañeros, el staff y los dirigentes que desde el día uno me trataron demasiado bien. Además quiero dedicar este título a mi familia, hace mucho que no estaba por acá y hoy vinieron a verme”, cerró uno de los factores del plantel comandado por Matías Martinho.
Fuente: Cristian Avellaneda, El Territorio.


