Luego de anunciar que Maximiliano Seigorman no continuará en la dirección técnica del equipo en la Liga Nacional, tras cinco derrotas en seis partidos, Unión debía afrontar el encuentro ante Independiente, en Santa Fe. Así, Martín Castellazzi asumió el puesto de su predecesor y, tras la victoria del Tatengue por 100-85, ratificó la vieja máxima según la cual el técnico que debuta, gana.
Los santafesinos y los de Oliva protagonizaron un duelo intenso, de rachas alternadas y mucha lectura táctica. El inicio fue parejo: la visita buscó cargar la pintura con Francisco Corradi, activo para jugar de espaldas y distribuir, mientras que el local apoyó sus primeras ventajas en la conducción de Franco Balbi (autor de 5 puntos de arranque) y en la firmeza defensiva de Chris Vogt.
El segundo cuarto comenzó con una ráfaga local, que estableció un parcial de 7-0 para abrir la máxima inicial. Un inspirado Daniel Hure estiró la diferencia a diez (39-29), lo que obligó al primer tiempo muerto de Martín González, entrenador de Independiente. Tras la reanudación, el conjunto que vistió de blanco se volvió a ordenar; mantuvo una ofensiva paciente y una defensa sólida que contuvo el impulso Tatengue.
El tercer cuarto arrancó con un triple de Emiliano Basabe, aunque rápidamente se repitió la tónica de los segmentos anteriores: tras un buen inicio de los muchachos de Castelazzi, llegó la recuperación del visitante de la mano de Enzo Filippetti, quien se sumó con protagonismo, acumulando 9 puntos hasta ese momento. Aun así, el Tate cerró mejor y se fue al último descanso arriba 74-69.
En el último período, Unión volvió a golpear de entrada. Hure abrió el cuarto con un triple y Felipe Queiros se estrenó con impacto inmediato: otro lanzamiento de tres puntos y un doble consecutivo para estirar la diferencia a 82-71 con 7:32 por disputar. Con el envión anímico a su favor, el local jugó sus mejores minutos empujando la diferencia a +15.
Esa combinación de efectividad, lectura y protagonismo repartido le permitió a Unión manejar el cierre sin sobresaltos y quedarse con un triunfo valioso para levantar cabeza y alcanzó el 14° puesto de la tabla, producto de cinco triunfos y ocho victorias. Por su parte, Independiente quedó 9° (7-6). Basabe fue la figura del partido, con 23 puntos anotados en 30 minutos jugados.
San Lorenzo también festejó en Boedo
El Ciclón, en su casa, se impuso ante Argentino, que todavía no puede salir del fondo. Si bien el encuentro comenzó peleado, una vez que el Cuervo logró una ventaja inicial de ocho, no hizo más que estirar la diferencia hasta el final del encuentro. Con autoridad, identidad y una gran muestra colectiva, los dirigidos por Sebastián Burtin cerraron el partido con un resultado de 88-52. Lucas Pérez fue el jugador más valioso de la noche con 14 puntos, 4 rebotes y 8 asistencias.
Con sus últimas dos victorias, San Lorenzo marcha 15° (5-8), en tanto que los de Junín están últimos, con sólo un triunfo en 13 partidos.



